Un remedio natural, efectivo y económico.

El Rabo de Gato es una mata pequeña de origen mediterráneo con numerosas ramas y flores amarillas que recuerdan al «rabo erizado de un gato». Tiene un aroma embriagador suave y fresco. Cuenta con numerosas propiedades beneficiosas para la salud. Es un potente antiinflamatorio, antiulceroso y antiséptico, por eso funciona muy bien para eliminar las inflamaciones, dolores y escozores oculares producidas por conjuntivitis, orzuelos, ojos hinchados y cansados.

Dormir poco o mal, estrés, cansancio, la contaminación, una mala alimentación, muchas horas delante de algún tipo de pantalla o alguna dolencia producida, como es en mi caso una operación ocular, son factores que originan hinchazones en los ojos (párpados), bolsas, ojeras, picores, etc. haciendo que los ojos se cansen y se carguen, y por tanto se inflamen con mucha frecuencia provocando dolor o malestar, además de ser signos muy «antiestéticos».

También por un lado, los colirios ya no están financiados por la Seguridad Social, por otro, los laboratorios han subido los precios, pasando nosotros lamentablemente de pacientes a «clientes». Tratándose de una gran incoherencia al existir millones de «pacientes/clientes» que padecen este tipo de dolencias en los ojos, y que ahora muchos se encuentran sin protección.

Por ello, y por mi experiencia personal (años y años lavándome los ojos con infusión liviana de Rabo de Gato) te recomiendo esta mata como un remedio casero y natural para calmar el dolor y desinflamar los ojos.

Hervimos una tacita de agua, echamos una cucharita de Rabo de Gato, tapamos y dejamos reposar y enfriar.
Posteriormente, con un colador de tela filtramos la infusión de Rabo de Gato, y así evitaremos que se cuelen partículas de la planta, utilizaremos también un pequeño embudo para pasarlo a un dosificador de gotas (ver video tutorial en la cabecera del post).
Por último, la infusión de Rabo de Gato para ojos hinchados y cansados ha de guardarse en la nevera, de ese modo conserva sus propiedades, suele durar una semana.

Aplicación y dosis:

Al despertarnos, aplicar dos gotas fresquitas de Rabo de Gato en cada ojo o lavarlos con un vasito oftalmológico (ideal cuando padecemos orzuelos o conjuntivitis) y dejar pasar un par de minutos para que se absorba.
Según molestias, se puede aplicar tres veces al día (no aplicar recién operado)

Contraindicaciones:

No se conocen.

Nota: Para una correcta dosificación, con las manos limpias, bajamos el párpado inferior con el dedo y mantenemos el ojo abierto, echamos la cabeza hacia atrás aplicamos las gotas y parpadeamos rápidamente. Así nos aseguramos su correcta asimilación, pues como todos sabéis es difícil mantener el ojo abierto cuando se le esta manipulando. Et voila, problema de ojos cansados e hinchados resuelto. 😀

Un abrazo

Lucho

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